Calidad del aire
Red de Monitoreo

Si bien hay muchos contaminantes preocupantes en diferentes comunidades, este proyecto se centra en aquellos que pueden monitorearse con precisión en tiempo real con una densa red de pequeños sensores y que son importantes para los resultados de salud de los residentes de Watts. Por lo tanto, la atención se centra en las partículas (PM2,5) y el dióxido de nitrógeno (NO2) en todos los sitios de monitoreo, así como en el ozono (O3) en ubicaciones seleccionadas. 

Materia particulada (PM2.5) es el término general utilizado para una mezcla de partículas sólidas y gotas líquidas que se encuentran en el aire. Las PM2.5 resultan de vehículos motorizados (tubos de escape y pastillas de freno), procesos industriales, construcción, polvo arrastrado por el viento, quema de madera y otras fuentes de combustión. Debido a su pequeño tamaño, las PM2,5 suponen un mayor riesgo para la salud, ya que pueden penetrar profundamente en los pulmones e incluso llegar al torrente sanguíneo. La exposición a la contaminación por partículas puede provocar un aumento de las admisiones hospitalarias, visitas a la sala de emergencias, ausencias de la escuela o el trabajo y días de actividad restringida, especialmente para aquellos con enfermedades cardíacas o pulmonares preexistentes, personas mayores y niños. 

Los óxidos de nitrógeno (NOx) son un grupo de gases formados por nitrógeno y oxígeno en cantidades variables. Los dos compuestos de NOx que más preocupan a la salud son el óxido de nitrógeno (NO) y el NO2. La fuente más común de NOx son los gases de escape de los vehículos de motor, pero ciertos procesos industriales en instalaciones como refinerías, centrales eléctricas, plantas químicas e incineradores de desechos peligrosos también generan esta contaminación. El NOx es un importante contribuyente al smog y la exposición a este contaminante puede dañar las vías respiratorias y empeorar las respuestas alérgicas en los asmáticos. 

El ozono (O3) es un gas incoloro que se forma a través de una compleja serie de reacciones fotoquímicas que involucran la luz solar y el calor, conocidas comúnmente como “smog”. No se emite directamente al aire, sino que se forma a partir de contaminantes “precursores” emitidos directamente (compuestos orgánicos volátiles reactivos (COV) y óxidos de NOx) en presencia de luz solar. Respirar ozono puede desencadenar una variedad de problemas de salud que incluyen dolor de pecho, tos, irritación de garganta e inflamación de las vías respiratorias. Los niños corren mayor riesgo de exposición al ozono porque sus pulmones aún se están desarrollando y es más probable que estén activos al aire libre cuando los niveles de ozono son altos, lo que aumenta su exposición.